
La furia de Tláloc sobre la CDMX: ¿Amenaza o vulnerabilidad?
INVITAN: GEOS POR LA EQUIDAD DE GÉNERO
Inauguración: 21 de noviembre, 11:00h, vestíbulo principal
Conversación: 22 noviembre, 16:00h, Auditorio Julián Adem
México es el país número uno en muertes por relámpagos; uno de los fenómenos naturales más impresionantes y letales que existen en el mundo.
A pesar de ser tan peligrosos, poseen una belleza peculiar que es difícil apreciar a detalle, no sólo por ser tan efímeros e inesperados, también porque aún existen muchas interrogantes alrededor de ellos, su comportamiento en algunos sentidos sigue siendo un misterio no sólo a nivel social, también a nivel científico.
En esta exposición Antonio Busqueta busca mostrar la belleza de este fenómeno en distintos monumentos emblemáticos de la Ciudad de México, a través de su lente y su experiencia como “Cazador de Rayos”.
Antonio ha buscado capturar la intensidad de la tormenta en un contexto conocido y con el que nos identificamos como habitantes de esta ciudad, lo que nos recuerda nuestro papel como entes que habitan un espacio, que estamos expuestos a estos fenómenos y que inevitablemente somos vulnerables a ellos.
El impacto de este proyecto no sólo abarca la fotografía, también se involucra a nivel social, cultural y científico. Es por eso que se enmarca dentro de las actividades del Comité de Género de los Institutos “Geos”.
Pues, aunque todos estamos expuestos a este fenómeno, existen poblaciones más vulnerables por las condiciones económicas y sociales, así como por el grado de marginación política y geográfica de algunas grupos, y en las que los roles de género juegan un factor que puede, en este caso, determinar su vida o su muerte.
Todas las fotografías de Antonio, son nocturnas, de una sola exposición (larga exposición), sin manipulación digital (ni stack) y a color.
Por su esencia son de alto riesgo, pues el reto no está en la técnica sino en el
peligro y la experiencia de trasladarse y adentrarse en la tormenta eléctrica, de soportar la intensa lluvia, el frío viento y de proteger su cámara estando siempre alerta.
Así, se ha convertido en “Cazador de Relámpagos” y tenemos el gusto de recibirlo en el CCA con su primera colección fotográfica que documenta este fenómeno en los lugares más representativos de una metrópoli.